Para eliminar las desagradables manchas de nicotina que se producen en las manos de los fumadores, basta frotarlas con un limón partido a la mitad. En el caso de los ceniceros manchados, tállalos con un corcho impregnado de sal fina. El mejor remedio es dejar de fumar.
Reconocimiento a empleados/as destacados de junio
Limpiezas Sayagó, empresa líder en limpieza de establecimientos, reconoce a sus empleados/as destacados de junio. El equipo de la empresa quiere...