Para los quemadores de la estufa
Un truco casero para limpiar la grasa reseca de los quemadores de la estufa consiste en exprimir un limón y diluir el jugo en un poco de agua caliente. Con ayuda de un estropajo se frotan los quemadores hasta que la grasa se desprenda.
Otro consejo para limpiar a fondo los quemadores consiste en encenderlos y esperar a que estén calientes, luego se seca con cuidado para no quemarse, se vierte unas gotas de vinagre en ellos y se frota con un estropajo de aluminio.
Cafetera siempre limpia
Si hace tiempo que no se usa, se ponen en el fondo tres terrones de azúcar. De ese modo se evitará el olor a moho. Si lo que quieres es dejar la cafetera como nueva, se deben meter todas las piezas de la cafetera en una olla con agua hirviendo y añadirle un cuarto de litro de vinagre. Se dejan las piezas dentro del agua hasta que se haya enfriado completamente.
Una paellera reluciente
El recipiente (paellera) no se oxidará si cada vez que lo laves, después de secarlo, cuando aún está caliente, pasas por su interior un papel de estraza empapado en aceite.
Sal para el horno
La mejor manera de limpiar el horno de la cocina es espolvoreándolo con sal cuando todavía está caliente. Si, por casualidad, dentro del horno se ha derramado algo, en ese momento se debe echar la sal. Se espera a que se enfríe y después se quita los residuos con una esponja.
Sartenes con antiadherente
Si con el uso las sartenes han perdido su capa antiadherente puedes echarles un puñado de sal y luego colocarlas sobre el fuego. Se debe dar vueltas a la sal hasta que adquiera un color marrón. Después, se retira la sal con un papel de cocina. Se repite esta misma operación cada vez que se vaya a usar las sartenes, no se tendrá problemas.
Cubiertos brillantes
La cubertería quedará luminosa si una vez por semana se introduce en una olla de agua hirviendo con detergente. Se debe dejar dos minutos y luego se enjuaga, pero es importante no meter cuchillos con mango de madera.